miércoles, 15 de diciembre de 2010

Para todos los hombres del mundo que quieran....

El conflicto en Villa Soldati reflotó un sentimiento horrible. La xenofobia. Ésta siempre existió en el país, en las diferentes capas de la sociedad. En algún momento, cien años atrás, imperaban en los sectores altos y medios altos, el desdén hacia los italianos, los judíos y, en menor medida, a los españoles y los eslavos. Ya hace 30 años, el origen de los inmigrados cambió drásticamente. Ahora es el turno de los países limítrofes+Perú (también de a poco está llegando un importante contigente colombiano). Ahora el desdén hacia estos nuevos inmigrantes vendrá de los sectores medios y medios bajos, sectores que, en significativísimas proporciones, desciende de los otrora discriminados. No nos alarmemos, el presidente francés Sarkozy actúa igual. Hijo de un húngaro y nieto de un griego.

Los neoxenófobos, para justificarse, alegan que sus abuelos vinieron a laburar, que era pacíficos, románticos, esperanzados, no se quejaban, ni exigían nada a nadie, ni andaban en el delito. Obviamente. Como era de esperar, los neoxenófobos, son bastante vulgares e ignorantes. Permeables, en fin. Si leyeran un poco de historia argentína, daríanse cuenta que sus argumentos inmigratorios comparativos hacen agua.  Inventan dos inmigranciones; el de la vieja e idílica inmigranción de "nuestros abuelos" y la nueva más cercana y oscura (y por ende, peor).

Hay que decirlo, la vieja inmigración era mucho pero mucho más bardera y llegaba a acciones mucho más polémicas y radicales. Repasemos.

1) El 14 de noviembre de 1909 un anarquista ruso, Simón Radovitzky, le tiró un bombazo al entonces temible jefe de policía Ramón Lorenzo Falcón.

2) El mismo jefe policial en mayo de 1909 desalojó una protesta anarco de la FORA dejando más de una docena muertos. Italianos, rusos y españoles. En el marco de la llamada Semana Roja.

3) En 1905, el anarco catalán Salvador Planas, le disparó al presidente Quintana. Pero su revólver falló

4) En junio de 1910, un anarquista español, tiró una bomba en plena actuación en el Teatro Colón.

5) En 1893, los suizos de habla germana de Santa Fe (dato de color: ancestros de Binner, Kirchner y Reutemann) en defensa de sus derechos políticos (querían votar en las elecciones comunales), más otras demandas de índole más económico, armaron un ejército propio! Tal es así que los helvéticos derrotaron a las tropas provinciales y obligarían a renunciar al entonces gobernador. En diferentes pequeñas ciudades, tomarían a tiros los juzgados de paz, las comisarías y hasta las sedes municipales.

6) En 1907, los inquilinos (casi todos inmigrantes) de los conventillos se levantarían por el aumento de los precios de alquileres. Mucho conventillos fueron desalojados por el ya afamado Ramón Falcón. Algunos de ellos se instalarían en carpas preparadas por los organizados muchachos del anarcosindicalismo

7) El 27 de enero de 1923, el teniente coronel Héctor Varela, fusilador de la Patagonia Rebelde, fue abatido sin piedad por un obrero alemán anarquista, en la zona de la Plaza Falucho.

Podemos sumar aquí los sucesos de la ya conocida Semana Trágica o el caso del italiano Severino Di Giovanni.  Así de lindos idílicos y pacíficos eran nuestros abuelos. Los de ahora, en definitiva, parecen unos nenes de pecho, a la hora de comparar.